Nuestro estilo de vida cada vez más acelerado nos ha llevado a consumir bebidas ricas en azucares y cafeína, alimentos que deben ser consumidos con moderación, pero que en el caso de los mexicanos se han posicionado como parte de la dieta regular.
Es recomendado tomar al menos 8 vasos de agua para mantener hidratados los órganos y articulaciones de nuestro cuerpo evitando su deterioro prematuro, llegar a un nivel de agua que pueda actuar de forma negativa resulta complicado ya que el riñón tiene la capacidad de evacuar 0,7-1 litro / hora en forma de orina, esto facilita que nuestro cuerpo permanezca hidratado y dificulta la retención de líquidos.
Previene la obesidad
Su uso como recurso de hidratación para mantener una dieta son reconocidos y aprobados por el estudio americano publicado en Los Anales de Medicina Familiar, en el que dice que las personas con obesidad tienen una relación directa con la deshidratación, puede entenderse que a mayor índice de masa corporal es más difícil consumir el agua necesaria para el funcionamiento correcto del organismo.
También se ha descubierto que el consumo de agua previo a comer disminuye el consumo de calorías.
Atención y capacidad mentales
La deshidratación no solo es responsable de la obesidad y el mal funcionamiento de órganos, en el artículo Motivos para beber agua, incluso sin sed (Ana Belen Ropero Lara y Marta Beltrá García-Calvo), señalan que la fatiga y bajo rendimiento cognitivo es también es un síntoma de una dieta baja en el consumo de agua.
La población mundial y en especial en países como México el consumo de agua es escaso y no cumple con lo necesario para mantenernos hidratados correctamente.
Otras fuentes para obtener este nutriente son verdura y frutas por su estructura conformada del 80% de agua, pero definitivamente tenemos que reducir el consumo de bebidas azucaras, ya que están directamente relacionadas a la obesidad y aumentan el riesgo de contraer enfermedades no transmisibles.